498€
487€
496€
Viajes Fin de Curso a Canarias
Las Islas Canarias, en el Océano Atlántico, son un paraíso para los grupos de estudiantes que buscan una combinación perfecta de playas espectaculares, paisajes volcánicos, cultura y actividades de ocio y aventura. Con sus siete islas principales, cada una con su propia personalidad y encanto, las Canarias ofrecen una experiencia fascinante para disfrutar de viajes de fin de curso.
Tenerife, la isla de la eterna primavera, ofrece contrastes entre norte y sur, que hacen de esta isla un acierto seguro para vuestro viaje escolar. No podéis dejar de visitar el Teide, el pico más alto de España y sus playas tan conocidas como Playa Jardín en Puerto de la Cruz o la Playa de las Américas en el sur.
Si preferís visitar Gran Canaria, vais a sorprenderos con las inmensas Dunas de Maspalomas, su capital, Las Palmas y el encanto del Puerto de Mogán, uno de los sitios más bonitos de toda la isla, conocido como la "pequeña Venecia".
Y por supuesto, un viaje de fin de curso a Lanzarote, hará las delicias de los amantes de la naturaleza. Con visitas obligadas al Parque Nacional del Timanfaya y sus paisajes volcánicos, los Jameos del Agua y la Cueva de los Verdes, Lanzarote fascina nada más aterrizar en ella.
Tenerife, la isla de la eterna primavera, ofrece contrastes entre norte y sur, que hacen de esta isla un acierto seguro para vuestro viaje escolar. No podéis dejar de visitar el Teide, el pico más alto de España y sus playas tan conocidas como Playa Jardín en Puerto de la Cruz o la Playa de las Américas en el sur.
Si preferís visitar Gran Canaria, vais a sorprenderos con las inmensas Dunas de Maspalomas, su capital, Las Palmas y el encanto del Puerto de Mogán, uno de los sitios más bonitos de toda la isla, conocido como la "pequeña Venecia".
Y por supuesto, un viaje de fin de curso a Lanzarote, hará las delicias de los amantes de la naturaleza. Con visitas obligadas al Parque Nacional del Timanfaya y sus paisajes volcánicos, los Jameos del Agua y la Cueva de los Verdes, Lanzarote fascina nada más aterrizar en ella.